COVID-19 se mantiene estable a medida que el Condado de Sonoma cambia a una fase endémica de respuesta al virus
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Los funcionarios de salud del Condado de Sonoma dijeron que la magnitud de nuevos casos de COVID-19 se conserva estable y ligera mientras el Condado se dispone a desmovilizar sus operaciones de respuesta a la pandemia a fin de mes.
El cambio en la estrategia pandémica del Condado se produce cuando millones de dólares en fondos federales y estatales de emergencia COVID-19 concluyeron el jueves. El Condado ahora tiene cerca de $5 millones para servicios de respuesta a la pandemia, alrededor de una cuarta parte de la cantidad disponible a través de subvenciones federales y estatales para el año fiscal que finalizó el jueves.
La Doctora Sundari Mase, Directora de Salud del Condado, dijo el jueves que el Condado de Sonoma sigue viendo una transmisión generalizada y constante de COVID-19. Pero dijo que no ha habido un incremento proporcionado en hospitalizaciones y muertes.
Hoy por hoy hay 36 pacientes en centros médicos locales que han dado positivo por COVID-19. El Condado ha promediado cerca de 37 hospitalizaciones por COVID-19 durante todo el mes de junio.
Pero Mase indicó que muchos de estos pacientes tienen "COVID incidental", lo que significa que están en el hospital por algo más que la enfermedad del coronavirus.
“Estamos viendo tasas de casos que todavía están en el rango de 30 y 40 (por cada 100,000 residentes). No obstante, en realidad no tenemos los resultados realmente negativos que vimos el año pasado o el año anterior”, dijo Mase. “Como resultado, nuestras hospitalizaciones y cifras de UCI permanecen completamente estables”.
Desde la pausa de primavera en las infecciones por COVID-19, la transmisión de variantes de ómicron altamente infecciosas ha sido rampante. Los funcionarios de salud regionales dicen que las tasas de infección actuales probablemente sean mucho mayores de lo que se cuenta oficialmente, ya que es probable que muchos residentes no informen resultados positivos de las pruebas rápidas.
Mase y otros expertos en enfermedades infecciosas dicen que los bajos niveles de enfermedades graves en la comunidad, a pesar de los altos niveles de transmisión, son un testimonio de la efectividad del esfuerzo de vacunación local. Cerca del 83% de la población apta del condado está enteramente vacunada.
Esta semana, los funcionarios de salud informaron la última muerte por COVID-19: un hombre con problemas de salud subyacentes de entre 80 y 90 años de edad que estaba completamente vacunado y al día con su régimen de vacunas. Su muerte, el 16 de junio, eleva la cifra oficial de muertos por la pandemia a 497.
Las autoridades dicen que las vacunas y los refuerzos de COVID-19, así como la inmunidad natural de una infección previa, han resultado en una pandemia mucho más manejable, que con suerte se está volviendo endémica.
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