Latinas son una fuerza que transforma al condado de Sonoma
The Press Democrat [English version]
Un creciente número de latinas en el condado de Sonoma se están graduando de la universidad, iniciando negocios y avanzando en roles de liderazgo para inspirar a la próxima generación. Conoce a algunas de las personas que están haciendo que esto suceda.
Guiar a los estudiantes hacia el éxito
Magali Telles es el tipo de persona que cualquier padre de adolescentes consideraría una bendición.
Como coordinadora de programas de preparación para la universidad, en Sonoma State University, visita los planteles de escuela secundaria y trabaja con estudiantes para asegurarse de que cumplan con los requisitos de elegibilidad y que entiendan el enredoso ingreso a la universidad y el proceso para solicitar ayuda financiera. Ella conoce todas las reglas, requisitos y formas. Ha guiado a cientos a través del camino. Sabe su labor.
Pero sobre todo, conoce las barreras que surgen a veces, desde las expectativas de la familia hasta los desafíos de ser el primero de una familia en ir a la universidad. En respuesta, Telles organiza el Latino Family Summit, que ofrece talleres en español a padres para conocer el proceso de admisión, la ayuda financiera y la vida universitaria.
El interés de Telles es más que profesional. También es personal.
Cuando era joven, los padres de Telles la habían animado a ir a la universidad, una oportunidad que ellos no tuvieron en México. Pero había una trampa: querían que su única hija viviera en casa y esperaban que fuera a la cercana universidad de Fresno.
Telles no podía esperar para salir del Valle de San Joaquín, por lo que discretamente aplicó a Sonoma State University, a 200 millas de su casa, en Rohnert Park.
"Me preocupaba que mi papá se asustara. Sabía que mi madre iba a hacerlo ", dijo Telles, recordando cómo se sintió cuando recibió la carta de aceptación de la universidad, una primavera, hace 16 años.
Como la mayor, Telles dijo que tuvo que llevar a su madre a citas y servir como su traductora. Cuando se fue a la universidad, su madre luchaba con tareas cotidianas, como pagar cuentas. Quería que su hija regresara a casa.
"Podía fácilmente haber renunciado y regresar", recordó Telles, de 34 años. Pero está contenta de haberse quedado en SSU, que dijo le proporcionó una atención personalizada que no habría recibido en un campus más grande, como en Fresno. También encontró apoyo en la hermandad latina, Lambda Theta Nu, un grupo que ella comenzó en el campus con otras siete latinas, en 2003.
Telles finalmente se graduó con una licenciatura en sociología, en 2005, y más tarde regresó a estudiar una maestría en educación. En su trabajo, frecuentemente trabaja con latinas jóvenes que luchan con desafíos similares a los que ella enfrentó, incluyendo la culpa de salir de casa.
"Escucho mucho de las estudiantes latinas, decir: 'Mis padres me necesitan'", dijo.
Sus padres ahora entienden que tomó la mejor decisión al ir a SSU, dijo Telles, una residente de Windsor que también trabaja con los padres de estudiantes latinos, ayudando a aliviar sus preocupaciones.
Los padres no siempre entienden la vida universitaria y las presiones que conllevan. Es una de las razones por las que Telles organizó el Latino Family Summit, que atrajo a 300 estudiantes y sus padres, esta primavera. Recibieron información sobre el proceso de admisión a la universidad, ayuda financiera, el California Dream Act y los servicios estudiantiles disponibles en el campus.
Para Telles, su trabajo es mucho más que proporcionar información sobre la universidad y dar a las familias una ruta para alcanzarla. "Se trata de ser un ejemplo en la comunidad", dijo.
Introducción de las familias a la vida universitaria
A Mariana Martínez le gusta llevar las cosas al más alto nivel en su propia vida, y anima a sus estudiantes a hacer lo mismo.
Catedrática de estudios chicanos en SSU, Martínez fue elegida el año pasado para formar parte de la junta directiva de Santa Rosa Junior College, donde se convirtió en la primera latina en ocupar ese cargo. También trabaja en el campus con el McNair Scholars Program, para ayudar a estudiantes de bajos ingresos y minorías a prepararse para el gran paso: perseguir maestrías. Este año, según informó, cerca de la mitad de los 23 estudiantes en el programa son mujeres, y muchas vienen del condado de Sonoma.
Si bien, estos números son alentadores, conseguir que los estudiantes persigan títulos de posgrado a veces requiere de emocionar a las personas.
Las mujeres en el programa pueden estar en el campus haciendo investigaciones hasta altas horas de la noche, lo cual a veces enoja a los padres, que no quieren que regresen tarde a casa, dijo Martínez. También le gusta llevar a las mujeres a conferencias afuera del estado y animarlas a que apliquen a las mejores universidades, incluso las del otro lado del país.